NO PUEDEN DESAPARECER
Necesitamos a las activistas por el medio ambiente
Las personas defensoras de la tierra, el territorio y el medio ambiente solo crecen en el seno de sus organizaciones y comunidades. La lucha colectiva es la tierra y aire que hace posible el activismo por el clima y el medio ambiente.
El acoso a esas comunidades y la represión a las activistas, en forma de hostigamiento y violencia, es una realidad que está marchitando nuestras opciones de hacer frente a la emergencia climática.
Entre 2012 y 2023, han sido asesinadas más de 2.100 personas defensoras de la tierra y el territorio en todo el mundo.
Las personas defensoras del medioambiente reciben hostigamiento, intimidaciones, campañas de difamación, estigmatización, acoso judicial, amenazas y agresiones, entre otras violencias físicas, jurídicas y sociales.
Las mujeres defensoras se ven expuestas a sufrir violencia sexual, son desacreditadas como defensoras, y con frecuencia discriminadas también por su orientación sexual, su origen étnico y su clase social.
Caso Río Chinautla, Guatemala
El basurero de Ciudad de Guatemala y los areneros que desplazan al pueblo Maya Poqomam
Caso comunidad Lajeb Keb, Guatemala
El desplazamiento de comunidades en Alta Verapaz, en Guatemala, frente a los intereses empresariales
Caso Río Chinautla, Guatemala
El basurero de Ciudad de Guatemala y los areneros que desplazan al pueblo Maya Poqomam
Caso comunidad Lajeb Keb, Guatemala
El desplazamiento de comunidades en Alta Verapaz, en Guatemala, frente a los intereses empresariales
Estamos llamadas a no mirar a otro lado y formar parte de su red de apoyo. Denunciemos la persecución y los abusos. Reivindicando las causas y derechos que cuidan a todo el planeta.
Todas somos defensoras, en todos los territorios: las vidas y las luchas de las personas y comunidades defensoras deben perdurar, sus acciones tienen que ser imborrables.
RECONOCIMIENTO
Y PROTECCIÓN
A las Personas defensoras del medio ambiente
Hacemos cuatro peticiones al Gobierno de España
Reconocimiento público a las personas
defensoras del medioambiente.
Mención explícita en los documentos de
resultados de la COP30
Impulso de Alianza internacional para la investigación y denuncia de las violaciones contra las personas defensoras.
Medidas para promover la protección de
defensoras del medioambiente a nivel
nacional e internacional.
Firma y enviaremos esta carta en tu nombre a la Ministra para la Transición Ecológica
EXIJAMOS EL RECONOCIMIENTO Y PROTECCIÓN DE LAS PERSONAS DEFENSORAS DEL MEDIO AMBIENTE EN LA CUMBRE CLIMÁTICA DE BRASIL (COP30)
Desde el 10 al 21 de noviembre de 2025 se celebrará en Belém (Brasil) la 30º conferencia de las Naciones Unidas sobre Cambio Climático (COP30), un encuentro crucial para que los Estados, en virtud de sus responsabilidades comunes pero diferenciadas, adopten medidas ambiciosas que permitan al conjunto de la humanidad hacer frente a los enormes retos de la emergencia climática.
El Consejo de Derechos Humanos de las Naciones Unidas reconoció en una resolución de 2019 el importante papel de las personas defensoras del medio ambiente para apoyar a los Estados a cumplir con sus obligaciones en virtud del Acuerdo de París.
A pesar de ello, los textos finales surgidos de las cumbres climáticas nunca han reconocido su papel fundamental. A pesar de las declaraciones y compromisos internacionales para su protección, las personas, organizaciones y comunidades defensoras del medio ambiente continúan enfrentándose a patrones de violencia sistémicos. Entre 2012 y 2023, han sido asesinadas más de 2.100 personas defensoras de la tierra y el territorio en todo el mundo, a lo que antecede un patrón de represión generalizado que incluye hostigamiento, intimidaciones, campañas de difamación, estigmatización, acoso judicial, amenazas y agresiones, entre otras violencias físicas, jurídicas y sociales. En el caso de las mujeres se desacredita su rol como defensoras, se ven expuestas a sufrir violencia sexual y con frecuencia son discriminadas además por su orientación sexual, su origen étnico y su clase social.
Es preciso enfatizar que el hostigamiento, acoso y represión para quienes defienden el territorio y el medio ambiente tiene un alcance global y se da también en nuestros propios territorios.
En un contexto global marcado por la triple crisis ambiental –de contaminación, pérdida de biodiversidad y cambio climático–, el Relator Especial de las Naciones Unidas sobre los Defensores del Medio Ambiente en virtud de la Convención de Aarhus, Michel Forst, hace el siguiente llamamiento:
“La represión a la que se enfrentan actualmente en Europa los activistas ambientales que recurren a la desobediencia civil pacífica representa una grave amenaza para la democracia y los derechos humanos. La emergencia ambiental a la que nos enfrentamos colectivamente, y que los científicos llevan décadas documentando, no puede abordarse si quienes dan la alarma y exigen que se actúe son criminalizados por ello. La única respuesta legítima al activismo y a la desobediencia civil ambientales pacíficas en este momento es que las autoridades, los medios de comunicación y el público se den cuenta de lo esencial que es para todos nosotros escuchar lo que los defensores del medio ambiente tienen que decir”.1
La próxima COP30 brindará a los Estados la oportunidad de dar seguimiento a sus compromisos en materia de cambio climático y de cumplir con sus obligaciones de proteger y garantizar un entorno seguro para las personas defensoras del medio ambiente.